Oye, tú sabes que la cosa está caliente con Sean "Diddy" Combs. Lo están acusando de ser el jefe de una ganga que obligaba a mujeres a hacer maratones sexuales con prostitutos. La vaina es que un jurado llegó a un veredicto parcial el martes en el juicio por tráfico sexual contra Diddy, pero no se pusieron de acuerdo en el cargo más fuerte, el de asociación ilícita, así que el juez le dijo que sigan hablando.
En una nota al juez Arun Subramanian, el jurado no dijo si en los otros cuatro cargos contra Combs, de 55 años, lo encontraron culpable o no. Dicen: "Hemos llegado a un veredicto sobre los cargos 2, 3, 4 y 5. No podemos llegar a un veredicto sobre el cargo 1 debido a que tenemos jurados con opiniones difíciles de conciliar". El juez les dijo a los 12 jurados que sigan deliberando, pero ya cerraron la jornada hasta el miércoles.
El cargo 1, mi hermano, es de asociación ilícita, donde dicen que Combs era el líder de una organización criminal que obligaba a mujeres a participar en maratones sexuales con prostitutos, y eso podría llevarlo a cadena perpetua. Además, Combs tiene otros dos cargos de tráfico sexual y dos de transporte con fines de prostitución.
La cosa se puso fea para Combs cuando su ex, Casandra "Cassie" Ventura, lo demandó por violación y agresión sexual. Aunque resolvieron eso fuera de corte por 20 millones de dólares, eso abrió la puerta a un montón de demandas y cargos.
El juicio duró siete semanas, y hubo testimonios que pusieron los pelos de punta, con miles de páginas de registros telefónicos, financieros y audiovisuales. Dicen que Combs tenía una organización criminal de gente de alto rango que "existían para satisfacer sus necesidades" y que usaba su poder para hacer de todo: trabajos forzados, distribución de drogas, secuestro, soborno, manipulación de testigos e incendios provocados. Pero el abogado de Combs, Marc Agnifilo, le dijo al jurado que nadie de esos testificó contra Diddy ni fue nombrado cómplice.
Para que lo condenen por asociación ilícita, el jurado tiene que estar claro de que la fiscalía probó más allá de toda duda razonable que Combs se puso de acuerdo con su gente para cometer al menos dos de los ocho delitos de los que lo acusan. Los ocho hombres y las cuatro mujeres del jurado tienen que estar de acuerdo en cada uno de los cargos.
Combs está acusado de tráfico sexual de dos mujeres: Ventura y otra que testificó bajo el nombre de Jane. Las dos contaron cómo fue el abuso, las amenazas y el sexo coercitivo en detalles que te dejan frío.
Los abogados de Combs admitieron que él le daba a sus parejas de vez en cuando, pero dicen que eso no es tráfico sexual ni crimen organizado. Agnifilo se burló de cómo los fiscales pintaron a Diddy como un tipo violento que causaba miedo. Dice que Combs es un "empresario negro exitoso y autodidacta" que tenía relaciones "complicadas" pero consensuadas.
La defensa analizó las historias de Ventura y Jane y hasta se burlaron, diciendo que las mujeres eran adultas que tomaban decisiones por su cuenta. Pero los fiscales no se quedaron callados y dijeron que el equipo de Combs había "tergiversado los hechos indefinidamente". La fiscal Maurene Comey le dijo al jurado que cuando Combs hacía de las suyas, "había sobrepasado tanto el límite que ni siquiera podía verlo". "En su mente, era intocable", dijo Comey. "El acusado nunca pensó que las mujeres a las que abusó tendrían el valor de decir en voz alta lo que les había hecho". "Eso se acaba en este tribunal", dijo. "El acusado no es un dios".
Combs se declaró inocente y no quiso testificar, que es una estrategia común en Estados Unidos. Sus abogados no tienen que probar su inocencia, solo sembrar dudas en el jurado sobre lo que dicen los fiscales.
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