La gente del barrio lleva más de 13 años pidiendo soluciones sin que las autoridades les hagan caso
Los tigueres y las doñas de San José la Mina, en la parte sur de Santiago, están que trinan porque las autoridades los tienen más abandonados que un carro viejo, sobre todo cuando se trata de lo básico como agua y luz, y de arreglar las calles.
La gente del comité del barrio dice que lo que más les tiene jartos es que la calle 14 está hecha un desastre. Esa calle es vital y cuando llueve se forma un río que deja a más de 1,500 familias sin poder salir ni entrar.
"Esa es la única vía de acceso y está al borde del colapso", dijo Marta Reyes, que es la que lleva la voz cantante en el barrio.
También están pidiendo que los metan en el presupuesto participativo, porque San José La Mina no ve un chele de la alcaldía, mientras que a otros barrios sí les están echando una mano.
"Hemos visto ingenieros venir a hacer levantamientos, pero luego no regresan", se quejó Marta Reyes.
Por eso están llamando al presidente Luis Abinader, al ministro de Obras Públicas, Eduardo Estrella, y al alcalde de Santiago, Ulises Rodríguez, para que se pongan las pilas y hagan lo que prometieron.
Para que les hagan caso, la comunidad va a hacer una caminata pacífica el próximo martes 13 de mayo.
La marcha será a las 10:00 de la mañana, para que todo el mundo se entere de lo que están pasando y para exigir que se pongan a trabajar de una vez.
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