Dicen que nunca dejaron el área donde se perdió la chamaquita Sheilin Villar.
Después de que la gente les cayó arriba por dizque no hacer nada para encontrar a la niña, el jefe de los bomberos de San Cristóbal, Francisco Rosario, se quejó de que la gente dude del compromiso de los equipos de rescate, recordando que ellos llevan años fajados por la comunidad.
"La población ha manifestado inconformidad con los organismos de socorro. Reconocemos el valor de los jóvenes que participaron en el rescate, pero no es justo que se nos juzgue. Nunca abandonamos la misión", dijo Rosario.
El pana explicó que en el operativo estuvieron gente del COE, Defensa Civil, Cruz Roja, la DAEH, el 9-1-1 y la Policía Nacional. "De las 97 personas que integran esas instituciones, un 20 % estuvo presente en la zona de Lavapié, donde ocurrió el hecho al final de la noche", aclaró.
El comandante mostró fotos y videos pa' que vean que los equipos nunca se fueron del sitio, justo cuando Joel Casilla Rivera, conocido como "Sobieky", a quien la gente del barrio ve como un héroe, encontró a la niña viva.
Casilla avisó mientras algunos ya buscaban por otro lado, cerca del río, a unos 500 metros de la alcantarilla donde la niña se fue.
"Lo más importante es que fue encontrada con vida. En ningún momento abandonamos. Fue el propio alcalde Nelson de la Rosa quien nos ordenó no retirarnos hasta obtener una respuesta", resaltó Rosario.
El jefe de los bomberos dijo que está orgulloso de lo que hicieron. "No importa quién la haya encontrado. Lo que importa es que apareció con vida. Si hubiésemos sido nosotros, habría sido un día normal, porque ese es nuestro trabajo diario", comentó.
Después de todo esto, el COE sacó de juego a su encargado en San Cristóbal, Conrado Bernard, por no hacer bien su trabajo en la búsqueda.
Rosario le pidió a la gente que tenga más empatía con los cuerpos de socorro. "Uno se enamora de esto, pero hay que estar un poco loco para ser bombero. No somos Superman, somos seres humanos", dijo, hablando de los riesgos que enfrentan a diario.
Contó que el equipo logró meterse 154 pies en la alcantarilla, mientras que la niña fue encontrada a unos 300 metros de donde se cayó. "Esto fue una obra de Dios. Mientras montaba a la niña en la ambulancia, no lo podía creer", confesó.
Unos sacos blancos y troncos de árboles han sido colocados justo en el hoyo donde cayó la joven Sheilin Villar, en Lavapié, San Cristóbal.
La chamaquita de 13 años sigue en el Centro Médico Constitución (CEMECON) después de pasar más de ocho horas atrapada en la alcantarilla.
El doctor Ricardo Salazar, que es el director del centro, dijo que la niña va a seguir en observación hasta que se le pasen las infecciones que le provocó estar tanto tiempo en el sistema cloacal. "Un equipo multidisciplinario, integrado por neumólogos y especialistas en salud mental, trabaja para estabilizarla completamente", explicó el doc.
Añadió que Sheilin ya está comiendo bien y puede caminar por sí sola.
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