Este domingo, aunque hay menos policías en el barrio, todavía están haciendo sus vainas de manera específica. La red que los tigueres intervinieron el fin de semana en Capotillo tenía cámaras montadas en lugares clave pa' saber cuando la ley entraba al barrio, eso fue lo que dijeron hoy a Diario Libre.
Un día después de que metieron un operativo militar y policial en el sector, la zona seguía intervenida, aunque con menos policías en las calles. La calle 42, que es como el centro del barrio, estaba llena de vigilancia, con patrullas paradas y unidades recorriendo el área.
En otras calles, los motores de la policía daban vueltas de vez en cuando, pero no había operativos todos los días en cada esquina. Aunque hay menos agentes, las autoridades dijeron que van a seguir haciendo sus movidas de manera estratégica.
"La cosa está más tranquila, pero ellos siguen ahí. En la 42 es donde más se sienten", comentó Antonio Hernández, que vive por ahí.
Los colmados estaban abiertos, los vendedores ambulantes y los carros seguían en movimiento como parte de la rutina, aunque siempre con los ojos puestos en los policías.
Los motoconchistas del barrio retomaron sus actividades, y aunque hay menos pasajeros, siguen trabajando normal.
"Claro, hay un grupo de gente que se asusta, pero uno sigue trabajando", dijo un motoconchista llamado Nono mientras esperaba clientes en una esquina.
"No hay zonas prohibidas para nosotros, porque somos del barrio", explicó. Agregó: "Ellos (los policías) saben quién está en lo suyo y quién no. A mí no me paran, porque saben que estoy trabajando".
El operativo del sábado tuvo de todo: helicópteros, drones y patrullas en una movida coordinada por el Ministerio Público, la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD), la Policía Nacional y el Ejército, con la idea de romper las redes criminales y recuperar el control en uno de los barrios más calientes del Distrito Nacional.
Esta intervención fue pa' tumbar sistemas de videovigilancia ilegal que, según las autoridades, los tigueres usan pa' chequear los movimientos de la policía y evitar que les caigan de sorpresa.
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