¿Qué quiere decir ser "cool"? un estudio mundial muestra coincidencias que sorprenden

Más allá de la moda: ser "cool" es compartir valores y actitudes parecidas en todo el mundo

Oye, mira, eso de ser cool está de lo más pegado y aunque hay diferencias en las culturas, la personalidad y los valores de una persona que decimos que es cool son sorprendentemente iguales en todos lados.

Eso es lo que dice un estudio que hicieron con más de 4,200 gente de doce países de todititos los continentes, liderado por la Universidad Adolfo Ibáñez de Chile, y lo publicaron en el Journal of Experimental Psychology: General.

La investigación tuvo gente de Alemania, Australia, Corea del Sur, Chile, China (tanto del continente como Hong Kong), España, Estados Unidos, India, México, Nigeria, Sudáfrica y Turquía.

Las personas que son consideradas cool, en general, se ven como más extrovertidas, hedonistas, poderosas, aventureras, abiertas y autónomas.

Eso es "un patrón estable en todos los países, lo que sugiere que el significado de cool ha cristalizado en un conjunto similar de valores y rasgos en todo el mundo", dice el estudio.

Las palabras más comunes para decir que alguien es cool son bacán en Chile, chido o padre en México o guay en España, aunque cada vez más se usa el término en inglés.

Aunque hay diferencias culturales fuertes, la mayoría de los participantes coincidió al decir qué significa ser cool.

Al equipo, que también tenía investigadores de las universidades de Arizona y Georgia (EE.UU), les sorprendió "mucho" esa coincidencia.

"Dado lo distintas que son las culturas, esperábamos que la idea de lo cool variara entre países. Sorprende que lo que se considera cool en España sea prácticamente lo mismo en China, India, Australia, Estados Unidos y otros países", destacó Pezzuti a EFE.

A medida que la moda, la música y el cine se expanden por el mundo, el significado de cool "ha cristalizado en un conjunto similar de valores y rasgos en todo el planeta" y se ha vuelto "más comercial", dice el artículo.

El equipo se enfocó en el término cool porque algunos lo ven ligado a la confianza y el dominio; otros, a la rebeldía. Y hay quienes dicen que se ha diluido tanto que ya solo significa caer bien, comentó Pezzuti.

Por eso, querían ir "más allá de las opiniones y obtener respuestas reales. Además, ser cool -o querer serlo- tiene un gran impacto en las personas y la sociedad. Es importante -dijo- entender qué significa realmente".

Los investigadores pidieron a los participantes que pensaran en alguien que consideraran guay, no guay, bueno o no bueno y que, a continuación, valoraran la personalidad y los valores de esa persona.

También analizaron las diferencias entre ser cool y ser bueno, porque ser bueno tiene muchos significados positivos, más que una cualidad o rasgo específico.

Entender en qué se diferencia cool de bueno puede ayudar a comprender qué hace que alguien o algo sea claramente cool y no solo positivo en general.

"Para que a alguien se le considere guay, normalmente tiene que ser simpático o admirable, lo que le asemeja a las buenas personas", afirmó Caleb Warren, de la Universidad de Arizona.

Sin embargo, la gente cool "suele tener otros rasgos que no se consideran necesariamente buenos en un sentido moral, como ser hedonista y poderoso", indicó el investigador, citado por la publicación.

Las buenas personas, en cambio, se veían más conformistas, tradicionales, seguras, cálidas, agradables, universalistas, concienzudas y tranquilas.

Aunque el estudio no analiza directamente cómo ha cambiado el término cool con el tiempo, el equipo tiene algunas ideas sobre eso, dijo Pezzuti.

"Nuestra teoría sostiene que las personas cool cumplen una función social: innovan y generan cambios culturales positivos. Aunque lo que se considera cool ha cambiado con las décadas, diría que la base se ha mantenido".

Algunos dicen que el término empezó entre músicos de jazz para describir a quienes tocaban con un estilo particular, recordó el investigador y agregó que "lo interesante es que esos músicos fueron justamente los que innovaron el estilo del cool jazz".

Las características que "probablemente los hacían cool, como ser independientes, abiertos, hedonistas, aventureros y con cierto poder, son las mismas que identificamos en nuestros experimentos".

El término "cool" nació en el entorno del jazz, en los años 40, y se popularizó gracias al saxofonista Lester Young, que tocaba de noche y en lugares cerrados con gafas de sol para dar la idea de un ambiente relajado.

Sin embargo, ya había gente "cool" antes de que naciera el concepto, por eso la primera de las cuatro secciones cronológicas de "American Cool" está dedicada a los predecesores.

Los primeros antecedentes vienen del siglo XIX, cuando hubo dos escritores, Walt Whitman y Frederick Douglas, que fueron "cool" por ser, respectivamente, el primer bohemio estadounidense y el creador de la imagen de los afroamericanos.

Otros "cool" de antes fueron Fred Astaire, Greta Garbo, Buster Keaton y Bessie Smith.

Luego llegaron los primeros que se llamaron "cool", Young, Gillespie o Duke Ellington, contemporáneos de otros, como Humphrey Bogart o Lauren Bacall, que lo eran sin decirlo, porque el término en los años 40 y 50 estaba más ligado al jazz.

Durante los 60 y los 70, el concepto se asoció a la contracultura y, según Joel Dinerstein, nadie representa el significado de "cool" en esta época como Bob Dylan, ya que después de él docenas de músicos fueron los "nuevos Dylan".

En los últimos años, los que quieren ser "cool" han tenido que superar la amenaza de la publicidad, que usa el concepto para vender. Los "cool" más modernos son personajes como Prince, Kurt Cobain, Quentin Tarantino o Tony Hawk.

Ver todo