"Poteleche: la vaina del día a día"

Rafael de los Santos, el tigre detrás de Poteleche

Oye, Rafael de los Santos es solo un nombre que sale en papeleo, cartas y vainas oficiales. Su mai todavía le dice Rafa. Pero hace rato que "Poteleche" lo agarró por completo y ahora ese es su nombre y su flow. Ese pana ya es parte del corillo con sus dibujos en Diario Libre, donde mezcla su mirada afilada con su buena onda.

Desde chiquito, Rafa ya tenía un don pa' dibujar, aunque nadie en su coro familiar era artista. Sus viejos, al ver esa vena, lo metieron en clases de pintura, pero él prefería crear a su manera, sin ataduras.

Por años pensó que iba a estudiar Arquitectura, hasta que se dio cuenta de que la Publicidad era lo suyo, porque alguien tenía que inventarse esos anuncios que se ven por todos lados. Además, siempre le ha gustado escribir.

Su mai le regaló los libros de Mafalda y eso fue una revelación, porque eran cómics con contenido profundo y con un sabor latinoamericano que le llegaba. También gozaba mucho de Condorito, por ese humor sin filtro, tan familiar y caribeño.

En 2005, abrió un blog donde empezó a tirar pequeños ensayos y a compartir algunos dibujos. Pero fue con Instagram que la vaina explotó. Ahí comenzó a subir un dibujo diario como un ejercicio personal, una especie de gimnasio pa' la mente.

Poco a poco, la gente fue llegando. Al principio eran dibujos más visuales, pero con el tiempo se convirtieron en comentarios sobre lo que pasa en el día a día. Fue ahí cuando todo encajó y las influencias de la infancia —Mafalda, Condorito— empezaron a tener sentido completo.

Llegó a Diario Libre después de que Harold Priego, el creador de Diógenes y Boquechivo, se fue. Los hijos de Harold estaban buscando a alguien que pudiera seguir esa línea, pero el humor de Poteleche es diferente, más suave, menos picante.

En la entrevista con el periódico, Poteleche dijo que quería un espacio propio que no dependiera de una herencia creativa. Por suerte, le dieron el chance, y el diario decidió despedir a Diógenes y Boquechivo de manera digna para luego arrancar con algo totalmente nuevo. Esto fue clave, porque la oportunidad llegó justo cuando él estaba claro en defender su identidad artística.

Desde entonces, el “Noticiero Poteleche” sale seis días a la semana. Sus dibujos le llegan a chamaquitos y adultos, con una mirada chévere y una percepción clara de la realidad.

También ha escrito un cuento pa' niños, Cuidado con las muecas, y ha dado talleres para los más pequeños. Más adelante, quiere crear contenido educativo que fomente el arte desde chamaquitos, porque está convencido de que todos llevamos un artista dentro, esperando despertarse.

Su blog, en sus inicios, tenía un lema que lo resume bien: "Ideas sanas y fuertes". Y así es el arte del día a día de Poteleche.

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