Por el lío que se armó, la jueza de la Oficina de Atención Permanente en el Palacio de Justicia de la Charles de Gaulle le metió tres meses de prisión preventiva a Michael Antonio Salazar Gonzales, alias "Piru", como medida de coerción.
"Mi hijo no era un tiguere (delincuente), no era muchacho del problema, era muy trabajador", así habla Yuderca Brito Celedonio sobre su hijo, quien murió en un lío raro el pasado 28 de abril.
José Ramón Reyes, mejor conocido como Pinguilo, perdió la vida después de que le dieran seis tiros en la calle La Campana del barrio Villa Faro, en Santo Domingo Este.
Ese día, Ramón fue a ver a su mamá, que tiene un problema del corazón, y de paso le llevó un dinero para sus gastos médicos. Mientras estaba en Villa Faro, decidió pararse un rato a compartir con la gente del barrio, los panas y conocidos de siempre.
La hermana de Ramón, Judith Brito, contó que mientras él caminaba por ahí, varios tigueres lo llamaron para saludarlo, ya que hacía tiempo que no lo veían. En eso, se armó un lío entre dos tipos que son primos. Ramón, sin pensarlo, se metió para calmar las aguas, sin saber que eso le costaría la vida.
"Él (Ramón Reyes) se metió al medio y les decía: dejen eso que ustedes son familia, no peleen. Pero ellos siguieron la discusión, el muchacho jaló, le tiró al primo, pero él se mandó. Quien se quedó parado fue mi hijo porque no tenía problemas con nadie. Lo que hicieron fue que le entraron a tiro y me lo mataron, le dieron seis tiros a mi hijo", dijo la madre.
El lío fue como a las 4:00 de la madrugada. Según el acta de denuncia, los tiros le hicieron una laceración en el corazón a Ramón y le causaron una hemorragia interna por una herida de bala que entró por el lado derecho del pecho y no salió.
Por ese lío, agarraron a Michael Antonio Salazar Gonzales, alias "Piru", y la jueza le impuso tres meses de prisión preventiva. Pero la familia de Ramón está pidiendo que también metan en el paquete a la mujer de Salazar Gonzales, a la hermana de esta, y a los demás que estaban con él cuando pasó todo.
"Yo quiero justicia y todo el peso de la ley. Quiero que caigan todos los que estaban, la mujer, hermana, los amigos que andaban con él. Que caiga todo el peso de la ley, mi hermano era un hombre serio, trabajador. Ellas son cómplices porque andaban ahí", exigió Judith Brito, la hermana del fallecido.
Judith también dijo que otro tipo, solo conocido como Gregory, alias "Kely", supuestamente le dio tiros a su hermano y ahora está en fuga.
Con lágrimas en los ojos y la voz quebrada, Judith describió a su hermano como un hombre trabajador que manejaba un colmado.
"Mi familia está sufriendo mucho, mi familia está destrozada", dijo.
El joven dejó cuatro hijos huérfanos y a su pareja embarazada.
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