Oye, te cuento que Jhoan Manuel García, uno de los tigueres metíos en el secuestro de una tipa allá en Buenos Aires de Herrera, Santo Domingo Oeste, se entregó a la Policía del Cibao Central este jueves. El pana se entregó en Santiago de los Caballeros, y todo fue de su propia voluntad. El periodista Orlando Reyes fue quien lo llevó directo donde el general Juan Bautista Jiménez Reinoso, que es el jefe de la policía en esa zona.
La vaina es que no es el único que se ha entregado. El "Patrón", un tal Rubén Darío Rodríguez Campos, que dicen que es uno de los cerebros del grupo, también se entregó en Villa Los Almácigos, allá en Santiago Rodríguez. El tipo tiene 43 años y fue con el alcalde y un cura a la policía, con los medios y todo.
Por otro lado, la "Doña", que es la jeva del "Patrón", también fue a entregarse, pero la soltaron al otro día porque tenía una orden de salida del Ministerio Público. Ella fue con su abogado al destacamento de Las Caobas en Santo Domingo Oeste.
Por esta vuelta, el "Patrón" y su hijo están presos y van a estar en Najayo Hombres por seis meses. Dicen que Rodríguez Campos alquiló el carro que usaron en el secuestro y que estaba en contacto con los otros tipos, dos de los cuales murieron en los operativos cuando la policía fue a rescatar a la víctima.
Todo esto lo está manejando el Ministerio Público junto con la Policía Nacional y varias unidades especializadas, como el Departamento Antisecuestro y la Dirección Central de Inteligencia.
Tanto Jhoan Manuel García como el "Patrón" están en el Sistema Penal como "prófugos", pero ya los van a mover a donde les corresponde para seguir con el lío legal.
Según la fiscalía, el "Patrón" y su hijo se juntaron con dos panas que ahora están muertos, Jesús Manuel Báez y Waldy Daniel Adames, y llegaron armados a un negocio de comida de la víctima, gritando que era un atraco. Hicieron que todos se tiraran al piso, amarraron a la víctima, y la sacaron con la cara cubierta, montándola en el carro que había alquilado el "Patrón".
Después, llevaron a la víctima a un apartamento en la calle Respaldo 4 en Las Palmas de Herrera. Todo esto se descubrió gracias a la inteligencia después de que el esposo de la víctima, Manuel Aquiles Álvarez Eusebio, denunciara que había recibido una llamada pidiendo tres millones de pesos para liberar a su mujer.
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