Una tipa contó que tuvo que ir pa'l médico por un fuetazo que le dieron en la cara. Al tipo le metieron una medida de coerción.
Luisa María Burgos, una jeva, se quejó de que su tigre, Juan José Domínguez, le entró a trompadas y le hizo un corte en la cara que necesitó puntos.
Ella dice que la vaina pasó el 9 de marzo, cuando el tipo volvió a la casa después de estar perdido por tres días. Después de estar rulay por ahí, el tigre quería volver pa' la casa, y fue ahí que le dio su pela, dejándola con el ojo todo hinchado y el párpado cortado.
Después de darle su golpe, Domínguez intentó arreglar la vaina poniendo una toalla y mentol en el ojo, pero cuando ella le dijo que necesitaba ver al doctor, él la llevó a una clínica.
Luisa María confesó que cuando las doctoras le preguntaron de dónde salieron esas heridas, primero no dijo nada, pero cuando llegó la poli, soltó la sopa y el tipo cayó preso de una vez.
Al otro día, ella fue pa' la fiscalía del Distrito Nacional a poner la denuncia. Dice que desde ahí la familia de su tigre la ha estado presionando con dinero pa' que quite la denuncia, pero ella no se ha dejado.
Además, dice que el tipo la llama desde la cárcel, tratando de embaucarla pa' que retire la denuncia, diciendo que "no fue grave" y que él la ama.
Burgos le pidió a las autoridades que se pongan las pilas con esto de la violencia de género y que no dejen que más mujeres pierdan la vida a manos de sus tigres o exes. "Muchas veces las mujeres callamos después de la primera o segunda agresión, pero ya no existe una tercera ni una cuarta, porque ellos deciden matarnos", dijo con preocupación.
El caso se está viendo en el Palacio de Justicia de Ciudad Nueva del Distrito Nacional.
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