Oye, tú supiste lo que pasó en La Rotonda, ¿verdad? Una vaina muy triste, manito. Ángel Junior Rodríguez Núñez, un carajito de solo 15 años, se fue de este mundo de una forma fatal el domingo por la mañana. Eso fue allá, por detrás de Delta Comercial, en Santiago. El chamaquito iba camino a su trabajo en un lavadero de carros, justo al frente de su casa, cuando de repente, ¡pum!, le dieron un tiro en la barriga.
Dicen que fue como a las 6:30 de la mañana cuando dos tigueres encapuchados pasaron en una motocicleta tirando plomo. Y fue ahí que una bala lo alcanzó. Ángel, pobrecito, lo llevaron rápido al Hospital Pediátrico Regional Universitario Doctor Arturo Grullón, pero no aguantó y murió por la herida.
El cuerpo del chamaquito lo mandaron pa'l Inacif en el cementerio del Ingenio. Tú sabes, la familia y los amigos tan to's allá, llorando y con una rabia que ni te cuento. Un testigo que estaba afuera del Inacif dijo: "Lamentablemente pasó eso, esa tragedia con ese muchacho. Tenía 15 años apenas, en nombre de Ángel le digo, un niño que solo iba a trabajar".
El dueño del lavadero, "El Pitbull", estaba ahí cuando pasó todo, pero no le pasó na'. La gente del barrio dice que esos tiros no eran pa' Ángel, que la cosa era con El Pitbull, pero los policías todavía no han dicho na' claro de por qué fue el lío.
El papá de Ángel, con el corazón roto, dijo: "Estaba frente de mi casa, iba ya. Tiraron un tiro y lamentablemente le pegó. Fue por aquí, por debajo de esta área, que tengan más consciencia, hoy fue el mío mañana no se sabe quién puede ser".
Luigi Tejada, que vio todo, dice que Ángel solo iba a trabajar y que no entiende por qué pasó esta muerte tan triste. Otros del barrio dicen que el chamaquito no tenía problema con nadie y era un muchacho trabajador.
"El niño se acababa de levantar a las 6:30 de la mañana. Iba a lavar el carro y esos encapuchados pasaron tirando tiros. Lamentablemente se le pegó una bala y le segó la vida. Un niño con apenas 15 añitos, comenzando a vivir", así dijo otro pana de él.
Ahora la policía ta' buscando a los responsables, mientras la gente del barrio ta' exigiendo justicia.
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