El ministro Luis Miguel De Camps le dio al mambo este viernes diciendo que en la escuela no solo se debe enseñar matemática y lengua, sino que hay que formar gente con conciencia. El hombre está claro en que meter la materia de Moral, Cívica y Ética Ciudadana en las clases es urgente con todos estos líos que estamos viviendo, porque hay que reforzar los valores y el amor por el país desde chiquiticos.
En una juntadera en Azua, De Camps le mostró a la gente el plan para meter esta materia en todos los niveles de la educación. No es solo otra clase más, es un proyecto de país, dijo el tipo. "La República Dominicana necesita hoy más que nunca una ciudadanía educada en el respeto, en la verdad, en la empatía y en la responsabilidad cívica. Esta formación no es un lujo, es una necesidad impostergable ante los tiempos que vivimos", soltó frente a los profes y la gente de la comunidad.
De Camps fue claro: la escuela tiene que hacer más que solo enseñar libros, tiene que formar cabezas pensantes. "Cada hora dedicada a la formación cívica será una hora de siembra de nación. No se trata solo de educar para aprobar una materia, sino de formar dominicanos con carácter, con criterio y con compromiso social", dijo con firmeza.
El ministro quiere sembrar una cultura donde la gente sea responsable, democrática y participativa, y que eso se vea en el día a día del barrio. "El respeto a la ley, la solidaridad, el cuidado del medioambiente y la convivencia pacífica son valores urgentes, no opcionales, en la realidad actual de nuestra sociedad", dejó claro.
Dijo que si se hace bien, "en una generación veremos florecer ciudadanos que saben disentir sin destruir, debatir sin agredir, y participar sin temer".
Ángel Beltré, que es el que habla en nombre de todos los padres y madres en Azua, le dio las gracias al ministro por la movida y dijo que la gente está contenta. "El pueblo lo acogió con alegría, porque sentimos que los valores van a volver a ocupar su lugar en las escuelas. Es una siembra que da esperanza", dijo con esperanza.
Al final, De Camps llamó a todo el mundo a unirse a esta causa: "Una sociedad que educa con valores siembra paz, construye institucionalidad, honra su historia y respeta al prójimo. El país que soñamos no se improvisa: se educa, se forma, se construye desde las aulas y con ética".
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