Oye, te voy a contar lo que pasó en Barahona de una forma más coloquial. La gente del Ministerio de Educación metió mano en una escuela de allá porque un pedazo del techo se cayó al piso en una de las aulas.
El pana Johnny Medina, que es el coordinador de la Dirección de Infraestructura Escolar del Minerd en esa zona, fue el que se encargó del asunto. Dicen que el lío no fue tan grave y que nadie estuvo en peligro, ni estudiantes ni profesores. Medina fue allá mismo pa' chequear lo que había que hacer y asegurarse de que todo estuviera bien.
Aunque el problema fue chiquito, Johnny dijo: "Aunque se trató de un desprendimiento menor, nuestra obligación es actuar con prontitud para garantizar condiciones seguras para toda la comunidad escolar". O sea, no van a dejar que eso se pase por alto.
Los tigueres que fueron para allá hicieron una revisión completa del área, quitaron lo que estaba suelto, pusieron el revestimiento de nuevo y reforzaron otras partes para que no vuelva a pasar. También limpiaron y protegieron la zona en colaboración con la dirección de la escuela.
El jefe de Infraestructura Escolar, Roberto Herrera, comentó que una brigada del Miderec ya había estado ayudando con los trabajos. "Terminaron de quitar la parte que estaba floja y la restituyeron de nuevo. Sin embargo, hoy, salió una brigada compuesta por técnicos nuestros, pero también por técnicos de la Oficina Nacional de Evaluación Sísmica y Vulnerabilidad de Infraestructura y Edificaciones (Onesvie), que están haciendo una evaluación estructural del centro", dijo Herrera.
Además, la escuela Fidelina Matos ya está en el "Plan 24/7: Rehabilitación y Conclusión de Infraestructura Escolar", que es una vaina que están haciendo para asegurarse de que todas las escuelas del país sean seguras y estén en buenas condiciones para los estudiantes.
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