Oye, manito, la vaina está fuerte con los líos entre la gente y la Policía por estos lados. En sólo seis meses, ya van 82 panas que han perdido la vida en esos "intercambios de disparos" con la Policía Nacional. Eso es casi el doble de los 55 que se murieron en el mismo tiempo el año pasado, según lo que encontró Diario Libre chequeando los reportes.
En junio na’ más, se fueron 16 chamaquitos por esa vuelta. La gente está preocupada porque dicen que la Policía se está pasando con la fuerza y que las cosas no son tan claras en esos operativos.
En mayo, la Policía contó 15 muertes iguales. Enero y abril fueron los meses más calientes hasta ahora, con 17 muertes cada uno, y febrero y marzo no se quedaron atrás. Todo esto ha hecho que la gente se ponga a mirar con lupa lo que están haciendo esos tigres de uniforme.
Uno de los casos que más sonó fue el de Alfredo Tavárez, "el Fay", que lo mataron en un allanamiento en Pueblo Nuevo, Mao, Valverde, el 28 de junio. La Policía dijo que "el Fay" les tiró primero, y ellos tuvieron que "repeler dicha agresión". Dicen que el tipo tenía su historial con vainas de robo y microtráfico.
Y días antes, el 23 de junio, Ángelo Acevedo Cabrera, "Locón", y Marco de Jesús Campos también murieron. Los buscaban por un montón de atracos. Según la Policía, ellos iban en un carro y cuando vieron a los agentes, empezaron a tirar tiros. Eso fue en Los Santos Abajo, Santiago de los Caballeros. Terminaron heridos y luego se fueron.
Aunque no fue en ese tiempo, el caso de Joangel García, un chamaquito de 17 años, ha puesto a todo el mundo caliente. Lo mataron el primero de julio en San Luis, Santo Domingo Este. Su mamá, Rosy García, dice que lo ejecutaron mientras dormía. Le metieron más de 14 tiros, según ella.
El Comité Dominicano de los Derechos Humanos en San Luis, con Diógenes Ozuna al frente, dijo que eso fue una ejecución extrajudicial y le echa la culpa a la Dirección Central de Investigación, el Dicrim. La Policía dice que Joangel tenía dos órdenes de arresto, pero la doña dice que eso es mentira. "¿Cómo es posible que una persona con una orden de arresto anda así normal? Ellos nunca me notificaron de eso. Dijeron que fue un intercambio de disparos, pero una persona con una pistola permita que le den 14 tiros y no dispare uno? Eso es mentira", dijo Rosy, llena de impotencia.
El jefe de la Policía Nacional, Ramón Guzmán Peralta, siempre está diciendo que los agentes tienen que responder igual de fuerte y que siguen los protocolos de la ley, que todo es proporcional. Pero la gente sigue con la duda, manito.
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