Mira, te voy a contar lo que está pasando con Miriam Haley y ese lío con Harvey Weinstein, pero en un lenguaje más del barrio dominicano.
Resulta que hace unos días, los abogados de Harvey Weinstein se pusieron pa’ interrogar a una tipa que dice que el tipo la agarró y la obligó a hacerle sexo oral hace como veinte años. La tipa, Miriam Haley, lleva tres días hablando en el juicio nuevo por violación de Weinstein.
La abogada de Weinstein, Jennifer Bonjean, la está presionando con preguntas, como si fuera una novela. Le está preguntando sobre sus recuerdos, hasta de una vez que dejó una puerta abierta en un edificio, y sobre toda su historia. Bonjean le tiró diciendo que Haley, que en ese tiempo estaba buscando trabajo en producción de entretenimiento, siguió en contacto con Weinstein, aunque él le había echado piropos a las piernas y le pidió un masaje en una reunión antes del supuesto ataque en 2006.
“¿Entendiste que eran insinuaciones sexuales?”, le preguntó Bonjean. Y Haley le dijo que sí.
“Las rechazaste, y él aún así te dio su número de teléfono, ¿verdad?”, siguió Bonjean.
“Sí”, dijo Haley, que consiguió un trabajo cortico en el programa “Project Runway” que producía Weinstein poco después de esa reunión en el Festival de Cine de Cannes en 2006.
La tipa ha dicho mil veces que ella solo estaba buscando oportunidades de trabajo, nada más con Weinstein. Bonjean también le preguntó por qué contrató un abogado y dio una conferencia de prensa con sus acusaciones cuando el movimiento #MeToo explotó en 2017. Dicen los abogados de Weinstein que todas las mujeres que lo acusan consintieron con él esperando conseguir trabajo en el mundo del entretenimiento.
Haley, que también la conocen como Mimi Haleyi, es la primera de tres mujeres que van a testificar en este nuevo juicio. Ella ha repetido y añadido detalles a su testimonio que llevó a la condena de Weinstein en 2020, que luego fue anulada. Dijo que Weinstein la agredió después de invitarla a su apartamento, pensando que iba a ser una reunión de trabajo y tranquila. Dijo que él la empujó a una cama y no le hizo caso cuando ella le decía: “No, no — esto no va a suceder”.
Ella y dos amigos dijeron que les contó poco después que Weinstein la había agredido sexualmente. Haley dijo que tomó un vuelo que ya estaba acordado a Los Ángeles, pagado por Weinstein, al día siguiente, y unas semanas después acordó reunirse con él en un hotel de Manhattan. Dijo que pensaba hablar en el vestíbulo, pero terminó yendo a su habitación, donde dice que tuvo sexo no deseado, pero no forzado, con él.
A pesar de todo eso, Haley dijo que siguió en contacto, a veces mandándole correos a Weinstein firmados con “Mucho amor”. Dijo que todavía estaba tratando de sacar provecho profesionalmente de conocer a Weinstein y que "suprimió muchas cosas" para poder lidiar con eso.
Bonjean le dijo el jueves que cuando Haley contó su historia en 2017, no mencionó su encuentro sexual posterior con Weinstein ni su contacto continuo. “Le contaste a la prensa solo parte de la historia, ¿correcto?”, preguntó Bonjean.
“Conté la parte que era relevante para lo que estaba tratando de compartir”, dijo Haley. Negó que hablara con la esperanza de demandar a Weinstein, aunque luego lo demandó y obtuvo un acuerdo de aproximadamente 475.000 dólares.
Enfocándose en la reunión de Cannes, Bonjean le preguntó a Haley qué pensaba del hecho de que había conseguido una reunión con un productor de alto nivel con poca experiencia. “Entonces, como alguien en mi posición, ¿debería haberla rechazado, es lo que estás diciendo?”, replicó Haley.
“No estoy diciendo que deberías haber hecho algo”, respondió Bonjean.
La abogada se apartará del equipo de defensa de Weinstein para atender otro juicio después de terminar con el interrogatorio a Haley, que debe volver al estrado el viernes.
El nuevo juicio de Weinstein incluye cargos relacionados con Haley y otra acusadora del juicio original, Jessica Mann, que dice que Weinstein la violó en 2013. También está siendo juzgado, por primera vez, por supuestamente tener sexo oral a la fuerza con la exmodelo Kaja Sokola en 2006.
La Associated Press no suele identificar a las personas que alegan haber sido agredidas sexualmente a menos que den su permiso para que se usen sus nombres. Haley, Mann y Sokola lo han hecho.
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