Oye, chacho, tú no te imaginas el lío que se ha armao' con la familia de Antonio Espaillat López, el dueño de la discoteca Jet Set que se fue pa' abajo. Hay un viaje de gente metiéndole querellas, pa' ser exacto, 82 en total, y nada más en las últimas 24 horas metieron catorce más.
Entre to' ese reguero de querellas, la esposa del pelotero Octavio Dotel, que fue una de las 236 almas que se nos fueron en esa vaina que pasó la madrugada del 8 de abril, también metió la suya. La Fiscalía del Distrito Nacional dijo que el jueves le cayeron con dos querellas y ocho denuncias, y el viernes le sumaron otras cuatro querellas.
En ese lío también están metidos Maribel, la hermana de Antonio, y la mamá de ellos, Ana Grecia López, sin dejar atrás a Evely Espaillat de Aybar. Y pa' colmo, están jalando al Estado y al Ayuntamiento del Distrito Nacional porque dicen que no pusieron ojo en ese negocio.
Massiel Javier Almonte, la mujer de Octavio Dotel y madre de sus tres muchachos, está pidiendo que a la familia Espaillat le pongan una garantía de 300 millones de pesos en efectivo y que les embarguen bienes por otros 60 milloncitos.
Los abogados de la viuda, Ingrid Hidalgo Martínez, José Antonio Valdez y Manuel Antonio, están en eso, y al caso le pusieron una calificación provisional de homicidio involuntario, como dice el artículo 319 del Código Penal Dominicano: "El que, por torpeza, imprudencia, inadvertencia, negligencia o inobservancia de los reglamentos, cometa homicidio involuntario, o sea causa involuntaria de él, será castigado con prisión correccional de tres meses a dos años, y multa de veinte y cinco a cien pesos".
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