El Cole Dominicano de Prensa y el combo del Movimiento Marcelino Vega están pidiendo a gritos que se haga justicia por la muerte de su hermano a manos de la policía.
Ya han pasado 44 años desde que mataron al periodista Marcelino Vega mientras estaba en lo suyo, cubriendo una protesta de los trabajadores del Ayuntamiento del Distrito Nacional, el 7 de abril del 1981. Los tigueres de la prensa están cansados de que se hagan los locos con este caso y otros crímenes contra los periodistas, que se han quedado en el aire.
El Cole Dominicano de Periodistas (CDP) y el Movimiento Marcelino Vega están firmes en que van a seguir pidiendo justicia contra los que mataron a Vega, Orlando Martínez y Gregorio García Castro.
Aurelio Henríquez, el que manda en el CDP, dijo que, aunque ya han pasado más de cuarenta años desde que mataron a Vega, ya es hora de que la Procuraduría y la Suprema Corte de Justicia (SCJ) se pongan las pilas y vuelvan a meterle mano a estos casos.
Él opina que la justicia dominicana tiene que dejar claro que los crímenes no se olvidan así porque sí.
El pana también dijo que la libertad del pueblo dominicano está manchada con la sangre de estos tres periodistas, que fueron eliminados por policías que trabajaban para los que tienen el poder, porque se sentían amenazados por lo que ellos publicaban en El Nacional, Última Hora y en La Noticias.
El presidente del CDP recordó que un 7 de abril del 1981 Marcelino Vega cayó abatido por los policías mientras estaba cubriendo una huelga de empleados cerca del mercado de la avenida Duarte.
Desde entonces, los grupos de prensa, el CDP, el Sindicato de Trabajadores de la Prensa (SNTP), el Movimiento Marcelino Vega y otros más no se olvidan de él y siguen pidiendo que los verdugos sean señalados con nombre y apellido y paguen por lo que hicieron.
Si no se hace justicia por "estos mártires" de la prensa, se estaría apagando la voz de la libertad. La sangre de ellos revivió la lucha para que el pueblo dominicano tenga más libertad y derecho a la información, concluyó el presidente del CDP.
Ese mismo día de la huelga, también le dieron a Jesús Ciprián Valdez "El Canillita", que repartía periódicos y también perdió la vida.
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