Oye, ¿supiste lo que pasó con la cuenta de Elmo en esa red social X? El domingo por la tarde, alguien hackeó su cuenta y empezó a poner mensajes bien feos, hablando mal de los judíos y tirándole a Donald Trump. Decían cosas como que había que exterminar al pueblo judío y llamaban a Trump "títere" de Benjamin Netanyahu.
Elmo, ese muñequito rojo de "Plaza Sésamo", tiene como 650,000 seguidores, y su trabajo es enseñar a los chamaquitos sobre la bondad y la paciencia. Pero esos mensajes raros estuvieron ahí un rato antes de que los borraran.
La gente de Sesame Workshop, los que están detrás de "Plaza Sésamo", le dijeron a la AFP que "un hacker desconocido publicó mensajes repugnantes", incluyendo algunos "antisemitas y racistas". ¡Qué lío, manito!
Esto es solo una de las tantas veces que han pasado cosas feas desde que Elon Musk compró Twitter en 2022 y quitó las reglas de moderación que él llama censura. Ya el sábado, su empresa xAI tuvo que pedir disculpas porque su asistente de inteligencia artificial Grok también se puso a alabar a Adolf Hitler.
La cosa está caliente con el antisemitismo en Estados Unidos. En mayo, mataron a dos empleados de la embajada israelí frente a un museo judío en Washington. Y en junio, en una protesta en Colorado por los rehenes israelíes en Gaza, explotó una bomba incendiaria hiriendo a más de diez personas. Una doñita de 82 años murió después por las heridas. ¡Qué fuerte, loco!
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