Gobernador del Noroeste de Haití dice "mantengan la paz en la frontera"

En un momento donde la cosa está caliente y con par de líos en la frontera norte entre Haití y República Dominicana, el gobernador del Departamento Noroeste de Haití, Dionel Germán, dejó claro su compromiso serio con la paz, la seguridad y el respeto entre los dos pueblos.

En una conversa que tuvo este fin de semana en Juana Méndez, Germán contó lo que el Gobierno haitiano está haciendo para retomar el control del territorio, ante la amenaza del contrabando y las pandillas. "Estamos aquí para mantener la paz en la frontera", soltó Germán, que lleva dos meses al mando de esa zona fronteriza.

Él dijo que aunque eso de volver a poner el portón fronterizo en el puente entre Juana Méndez y Dajabón ha causado bulla, la vaina es clara: "No se trata de dividir, sino de establecer control y garantizar la seguridad para ambos lados de la isla".

El gobernador aceptó que decisiones recientes, como prohibir la entrada de mercancías vía terrestre usando a la República Dominicana como tránsito hacia Haití, han fregado a los pequeños comerciantes. Pero dijo que esas medidas son para pelear el contrabando y cortar las patas de las estructuras ilegales: "Cada ventaja tiene su inconveniente. Si queremos seguridad, debemos asumir decisiones difíciles".

Germán también habló del tema de la migración irregular y de lo que está haciendo el alcalde de Dajabón, Santiago Riverón, con los haitianos en territorio dominicano. "Él puede tomar decisiones para controlar su municipio, pero siempre debe respetar los derechos humanos, especialmente de los niños, mujeres embarazadas y personas mayores", afirmó. Añadió que la migración se debe manejar desde las instituciones que saben del asunto, respetando el trabajo de cada quien.

Sobre la seguridad en el noroeste de Haití, una zona que se ha mantenido más tranquila que otras con el tema de las pandillas, Germán aseguró que eso ha sido gracias a un esfuerzo conjunto entre la gobernación, la justicia y la policía. "Aquí la gente puede vivir con tranquilidad. Nos mantenemos en vigilancia constante para evitar que las bandas armadas se instalen en esta región", dijo.

El gobernador cerró con un mensaje de esperanza y trabajo conjunto entre los dos países que comparten la isla. "A veces, hasta en una casa entre esposo y esposa hay conflictos. Pero nosotros, como autoridades, estamos condenados a trabajar juntos, en el marco del respeto a las leyes y los derechos humanos. Porque si a Haití le va mal, también se verá afectada la República Dominicana", indicó.

Ver todo