Empresa a la que le "tumbaron" un arsenal de armas que iban pa' Haití tenía cinco años "chiviando"

Mira, en el barrio se comenta que Urbano Eugenio García y Máximo Pérez Berigüete son los tigueres que manejan esa vaina de transporte, según lo que dijo el Ministerio Público. Los polis le cayeron de sorpresa y les encontraron facturas que valen un dineral.

La empresa Eugenio Trading, que es donde los capos metieron un cargamento de armas que vino desde Miami pa' Haití, tenía más de cinco años echando pa'lante. El que está al frente de ese negocio es Urbano Eugenio García.

Según los papeles del Ministerio Público, el otro pana, Maximino Pérez Berigüete, era el que se encargaba de recibir los contenedores aquí en RD y luego los mandaba pa' Haití. Entre el 2020 y el 2024, esos tigueres se buscaron como 20,535,830 pesos y 160,764 dólares con el negocio de los envíos, según la solicitud de medida de coerción.

Estos dos viven por Elías Piña y Las Matas de Farfán, allá por el sur, cerquita de la frontera con Haití.

Les cantaron un año de prisión preventiva

Este jueves, en Santo Domingo Oeste, la Oficina de Servicios de Atención Permanente le dio un año de prisión preventiva a Urbano Eugenio García y Máximo Pérez Berigüete como medida de coerción.

El Ministerio Público pidió que el caso sea declarado complejo, y el tribunal le hizo caso. Así que García va pa' la cárcel de Haras Nacionales, en Santo Domingo Norte, y Pérez Berigüete lo mandaron pa' Najayo-Hombres, en San Cristóbal.

El arsenal

El cargamento que agarraron aquí, que vino en un contenedor desde los Estados Unidos, tenía más de 36,000 balas de distintos calibres, 18 cargadores de fusil, 13 cargadores de 9 milímetros, un cargador para fusil calibre 50, un silenciador y una caja de pistolas. También encontraron 23 armas de fuego, incluyendo un fusil Barrett calibre 50, 15 fusiles calibre 7.62, un fusil calibre 9, cinco pistolas Glock calibre 9 milímetros y un subfusil calibre 9 milímetros.

El abogado de los panas, Luis Matos, no está muy contento con la decisión del tribunal y dice que sus clientes son "tontos útiles" y que solo manejaban una empresa de envío. "Es muy difícil que ellos supieran lo que iba dentro del contenedor", dijo el tipo.

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