Oye, mira cómo ta la vaina: El Tribunal Superior Administrativo (TSA) volvió a darle la razón a la Dirección General de Contrataciones Públicas (DGCP). Ellos habían tumbado un contrato de 25 años del Teatro Agua y Luz que le habían dado a una compañía del hijo de Miguel Vargas Maldonado. Esa gente se fue a buscar justicia pa’ ver si tumbaban la decisión de Contrataciones Públicas, pero no le salió.
Esta vez fue la Primera Sala del TSA que decidió sobre el lío que armó la empresa Consultoría Astur, S.A. Ellos estaban en contra de la resolución RIC-96-2020 que la DGCP había sacado.
“La sentencia 0030-02-2024-SSEN-00604 confirma en todas sus partes la referida resolución emitida por el órgano rector en diciembre del 2020 por considerar que la decisión estuvo precedida de las garantías procesales que comportan el derecho de defensa y la tutela judicial efectiva y, por ende, cumplió con el debido procedimiento administrativo”, así dijo una comunicación de prensa de la DGCP.
Dicen que el TSA también respaldó que la DGCP tiene poder pa’ echar pa’ atrás lo que no sea claro y legal, gracias a la ley 340-06 de Contrataciones Públicas.
El problema vino porque en la licitación pública nacional Núm. CFIH-CCC-LPN-2015-001, que hizo la Corporación de Fomento de la Industria Hotelera y Desarrollo del Turismo (Corphotels) pa’ arrendar el Teatro Agua y Luz, hubo par de vainas raras que no pasaron la prueba, y por eso la DGCP lo declaró ilegal en dos ocasiones.
En una nota de prensa, la DGCP dijo que están comprometidos con hacer las cosas bien en las contrataciones públicas, asegurando que todo sea limpio y legal, pa' que los cuartos del Estado se usen como es.
“Como resultado de nuestro compromiso se devolverá el Teatro Agua y Luz al patrimonio del Estado dominicano de donde nunca debió salir”, eso lo dijo el director general de la DGCP, Carlos Pimentel.
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