Oye, te cuento lo que pasó con el príncipe Harry, el hijo menor del rey Carlos III. Resulta que este miércoles él perdió una demanda contra el Gobierno británico porque le bajaron el nivel de seguridad en el Reino Unido desde que dejó de ser parte de la monarquía en 2020.
El Tribunal Superior de Londres dijo que el ministerio del Interior hizo todo según las reglas al decidir que la protección para Harry y su familia ahora depende de cómo esté la cosa en el momento. Los abogados de Harry dijeron en una audiencia en diciembre que no se evaluó bien el riesgo al reducirle la seguridad policial y que él solo quiere que su familia esté segura cuando visiten el país.
Por su parte, la gente del ministerio dijo que sí hicieron esa evaluación y que Harry va a seguir teniendo protección pagada por el Estado, pero que no será automática, sino "diseñada expresamente" según cada situación.
En una declaración escrita durante el proceso, Harry, que ahora vive en Estados Unidos con Meghan Markle y sus dos hijos, dijo que es importante mantener el mismo nivel de seguridad que tenía cuando era parte de la realeza. "El Reino Unido es mi hogar, es clave para la herencia de mis hijos y donde quiero que se sientan en casa tanto como en el lugar en el que viven ahora en Estados Unidos", dijo él mismo en una declaración.
La decisión de bajarle la seguridad fue tomada por el Comité Ejecutivo para la Protección de la Realeza y las Figuras Públicas, que se encarga de la seguridad de la familia real y dignatarios extranjeros.
El año pasado, Harry también perdió otra demanda para poder pagar de su bolsillo por la protección pública cuando visite el Reino Unido, y además está metido en varios pleitos legales contra medios de comunicación del país.
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