El narco ta' metío en el poder: los líos de lavado y drogas que tienen a los políticos dominicanos en el medio

Miguel Andrés Gutiérrez Díaz se convirtió en el primer legislador dominicano que cae preso por narcotráfico, mi hermano. En los últimos cinco años, en este país se ha visto una vaina seria: políticos metidos hasta el cuello con los tigres del narco y lavando cuarto. Por lo menos diez diputados, alcaldes, regidores y exfuncionarios están en líos, acusados o investigados por estar metidos en redes de crimen organizado, tanto aquí como afuera.

El PRM, que es el partido que está en el poder ahora, tiene varios de sus representantes en la mira de las autoridades por casos sonados. Una de las más mencionadas es la diputada por La Vega, Rosa Amalia Pilarte. El Ministerio Público dice que ella fue clave para lavar más de 4,000 millones de pesos que venían del narco, un dinero que dicen está ligado a su esposo y otros familiares que también están en candela desde el 2020. Pilarte, que todavía estaba trabajando, fue mandada a juicio de fondo en el 2023.

Otro que está en la boca de todo el mundo es el diputado Miguel Gutiérrez Díaz, también del PRM. A él lo agarraron en Miami en el 2021 y, después de declararse culpable, le cayeron 16 años de cárcel en el 2024 por conspirar para meter más de cinco toneladas de cocaína a Estados Unidos.

Junto a ellos también están los diputados del PRM Nelson Marmolejos Gil, Faustina Guerrero Cabrera y Héctor Darío Féliz Féliz, que los están investigando como parte de una de las investigaciones antidrogas más grandes del país en los últimos tiempos. Dicen que están ligados a estructuras de financiamiento político raro y conexiones con redes de narcotráfico internacional.

El regidor del Distrito Nacional por el PRM, Edickson Herrera Silvestre, se entregó en mayo de 2025 a las autoridades gringas después de que lo acusaran de conspirar para mandar cocaína pa' allá. La acusación la hizo una corte federal en Florida, y él tiene tres cargos serios por narcotráfico internacional.

Otro regidor, Walky Cuevas Charles, del BIS, fue arrestado en septiembre de 2024. Dicen que es parte de una red dirigida por Junior Santos Restrepo, un supuesto capo. Según la acusación, Cuevas habría lavado cerca de 300 millones de pesos en los últimos diez años.

En el ámbito municipal, el exdiputado y director de distrito en Bayahíbe, Enriquillo Luis Brito, que primero estuvo con el PLD y luego con el PRM, fue arrestado junto a su hijo en enero de 2025 por su supuesta conexión con la entrada de 9.8 toneladas de cocaína que agarraron en el Puerto Caucedo.

También extraditaron en el 2021 a Erquidenio Balbuena Agueda, exalcalde de Las Galeras (Samaná), por tráfico de cocaína en Puerto Rico, donde enfrentó líos legales por supuestamente ser parte de una red de transporte de drogas por mar.

Y eso no es todo, porque el narcotráfico ha salpicado a otros niveles del gobierno. En 2020, Yamil Abreu Navarro, exdirector municipal de Las Lagunas (Azua) y del PRM, fue extraditado a Estados Unidos. En 2025, el general retirado William Durán Jerez, que tuvo cargos de seguridad en instituciones públicas, fue acusado en una corte federal gringa de conspirar para distribuir cocaína. Dicen que él era uno de los que supervisaba el tráfico hacia EE.UU.

Para rematar, en 2022, el excónsul dominicano en Jamaica, Jeremías Jiménez Cruz, fue condenado a 15 años de prisión en Nueva York, después de admitir que usó su inmunidad diplomática para llevar cargamentos de cocaína por avión y barco.

De todos los líos documentados entre 2020 y 2025, al menos siete de los involucrados han sido del PRM, seguido por el PLD, el PRD y el BIS. Aunque el gobierno dice que estos casos reflejan un sistema de justicia independiente, la cantidad de gente del partido en el poder metida en problemas pone en duda los filtros internos de los partidos para elegir a sus candidatos y controlar cómo se financian las campañas.

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