Oye, mi gente, la Primera Dama Raquel Arbaje llegó del Vaticano y compartió algunas reflexiones bacanas sobre cómo el poder es liviano y todos somos iguales, especialmente en estos tiempos difíciles de abril. Ella fue con su esposo, el presi Luis Abinader, a las honras del Papa Francisco, y dijo que el Papa tenía un amor por la humanidad que se parecía mucho al de Jesús.
Raquel nos dijo en su cuenta de X: "No nos dejemos impresionar por todo lo que se ve de fuera", y también mencionó que le encantaría decirle muchas cosas a su gente. Ella subió dos posts donde hablaba de que todos los seres humanos valen mucho, de ser sencillos y de cómo aguantar los momentos duros.
Ella también dijo: "Todos somos iguales, todos somos humanos y ese es el legado del Papa Francisco: su sencillez, su humor, su cercanía, fiel reflejo del amor de Jesús a los demás", y nos aconsejó: "Construyamos cada uno nuestra hoja de vida. Con la mejor sonrisa aún en tormenta".
Raquel dejó claro que ella "no era una santa" y que "el dinero era solo una vía para tener cierta seguridad". También dijo que uno no tiene que ser famoso pa’ tener éxito.
Comentó sobre cuando su esposo Abinader se reunió con el presidente gringo Donald Trump: "Claro que Luis saludó al Pte Trump y que uno conoce en estos años de servicio público a varios líderes, pero esto es pasajero".
También habló de cuando subieron el féretro del Papa y cómo fue un momento de reflexión personal para ella. Al final, se despidió "con un abrazo" y mandando sus respetos.
Raquel y Luis regresaron al país por la Base Aérea de San Isidro a las 4:50 p.m. el domingo, después de los funerales del Papa Francisco que terminaron el sábado en el Vaticano. Viajaron con Alfredo Pacheco, el presidente de la Cámara de Diputados.
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