Esta serie basada en el libro de Gabriel García Márquez tiene ocho nominaciones pa' los Premios Platino en su edición XII. Macondo es ese pueblito inventado donde García Márquez metió todo ese realismo mágico con la familia Buendía, un reflejo de la historia de Colombia y cómo se repiten los mismos líos de siempre en la sociedad.
"Los colombianos y los latinoamericanos estamos condenados, como en la novela, a seguir nuestro sino violento. Y, bueno, es una forma muy hermosa -en referencia a la serie- de volver a conectarnos como nación", dijo Natalia Plaza, una de las directoras de los primeros ocho capítulos de esta serie.
Plaza le dijo a EFE que "esa belleza poética, esa mezcla entre la barbarie y la poesía que logra tan bien García Márquez" fue una gran responsabilidad cuando se trataba de llevarla a la pantalla.
La idea era hacer una adaptación fiel al libro, pero con su propio flow. La serie ´Cien años de soledad´, que ya tiene su segunda parte en plena grabación pero sin fecha de estreno, es una de las estrellas de los Premios Platino, que se celebran mañana 27 de abril en Madrid.
En estos premios, la serie tiene ocho nominaciones, incluyendo Mejor Miniserie o Teleserie Cinematográfica, Mejor Guion Adaptado, Mejor Dirección, y también por las mejores actuaciones tanto de hombres como de mujeres.
Jose Rivera, el guionista principal de la serie, dijo junto a su compañera que esto es bien emocionante porque se va a reconocer el trabajo en equipo de mucho tiempo. Él comentó que le encanta el libro y que cuando lo leyó por primera vez, le recordó las historias que le contaba su abuelo.
"Parecen tan reales. Y el romanticismo y la belleza de la poesía fueron una delicia. Fue difícil porque el libro es complicado y la televisión es simple. Así que crear televisión a partir de ese libro llevó mucho trabajo", dijo.
Para él, el hecho de no ser colombiano -porque José Rivera es de Puerto Rico- le permitió no sentir tanta presión al adaptar la novela, aunque él dice que esta es su producción "más importante".
"No se sentía como un trabajo, se sentía como un placer. A veces me volvía loco tratando de hacerlo, pero sentía que era la cosa más importante en la que he trabajado nunca", dijo en la entrevista.
Por último, Rivera piensa que las historias latinas están en un buen momento en la industria audiovisual, pero sabe que "eso puede cambiar" en cualquier momento. Por eso, anima a sus colegas iberoamericanos a seguir luchando "por las historias que amamos, para que nuestra cultura se exprese, (...) tengo esperanzas porque hay mucha gente con talento".
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