Oye, mi gente, déjenme contarles lo que pasó en Las Tres Cruces de Jacagua, allá en Santiago. La vaina está caliente porque un chamaquito de solo 5 añitos está grave en el hospital después de que un motorista, mientras estaba "calibrando" como loco por la acera, lo llevó de encuentro.
El niño ahora mismo está en el Hospital Pediátrico Doctor Arturo Grullón, recibiendo atención médica tras ese mal golpe que le dieron. Dicen que tan pronto pasó el lío, el motorista se dio a la fuga como si nada, y hasta ahora no se sabe quién es, anda como un fantasma.
La gente del barrio está que no aguanta más. Están diciendo que esto se veía venir, porque los motoristas aquí andan haciendo su show todos los días, y nadie hace nada. "A ese muchacho ya se le había llamado la atención por andar calibrando... pero no hizo caso", dijo Rosa Paulino, que es la presidenta de la junta de vecinos, con la cara llena de impotencia.
Rosa dice que esto no es nuevo, que las callejuelas del barrio están llenas de estos tigueres en motores a toda hora, poniendo en peligro a todo el mundo, desde los carajitos hasta los viejos.
Esto pasó el domingo pasado, justo después de que en Los Salados, también en Santiago, un boxeador profesional murió porque otro motorista lo llevó por delante haciendo acrobacias. La gente de Las Tres Cruces ya está harta y exige a las autoridades, especialmente a la Digesett, que se pongan las pilas.
Quieren que haya más presencia policial, operativos y que castiguen a los que andan haciendo de las suyas en la calle. "No podemos seguir esperando que otra vida inocente se pierda para que actúen", dijo una vecina llorando. ¡Ya es hora de que esto pare!
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